domingo, 18 de octubre de 2009

Duda en la boca



El que es rico en recuerdos, nunca está solo.

No me refiero a esas persistentes impresiones que los grandes sufrimientos o los momentos de gloria graban tenazmente en la memoria: un momento fugaz de felicidad, el furtivo contacto de una mano, una palabra impregnada de dulzura, cualquier ráfaga efímera que se encuentra remontando la ola de la vida, basta en ciertas naturalezas para formar un tesoro inagotable en la memoria...



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Miguel Cané
Los músicos de la montaña

Cuentistas argentinos del siglo XIX / Antología

Estrada, BA, 1950
[ p.186 ]

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